Jorge, que acaba de morir, está parado frente a las puertas del
cielo. San Pedro le dice que no puede entrar así nomás al paraíso,
ya que Jorge, en vida, evadió impuestos.
La única manera en la cual Jorge puede entrar al paraíso sería si él
acepta dormir con una mujer espantosa y estúpida durante los
próximos cinco años, y disfrutarlo.
Jorge decide que es un precio barato por una eternidad en el
paraíso. Entonces se junta con una mujer espantosa y estúpida,
fingiendo que es feliz.
Mientras va con el esperpento, Jorge ve a su amigo Daniel caminando
adelante, con una mujer incluso más horrible. Jorge le pregunta de
qué se trata.
Daniel responde: "Evadí mis impuestos y estafé al Estado por un
montón de plata".
Cuando se dan cuenta que los dos están en la misma, deciden pasarlo
juntos, como una manera de disminuir la carga.
Jorge, Daniel y sus dos horribles compañeras siguen caminando,
pensando en sus destinos, cuando repentinamente ven a alguien que
parece ser un viejo amigo ¡Ricardo, que viene hacia ellos!
El tipo viene con una mujer despampanante, una supermodelo: es una
"chica de tapa". La mujer más fabulosa que jamás hayan visto.
Impactados, Jorge y Daniel se acercan al tipo y descubren que,
efectivamente, es el viejo Ricardo. Le preguntan cómo hizo para
enganchar semejante diosa, mientras ellos andan con semejantes
bichazos.
Ricardo responde:
"No tengo idea, pero, definitivamente, no me quejo. Es sin duda el
mejor momento de mi vida, y he tenido cinco años del mejor sexo que
un hombre puede tener.
Hay una sola cosa que no entiendo: cada vez que terminamos de hacer
el amor, ella me da la espalda y murmura:
¡Malditos Impuestos!